Las fragancias creadas en Laboratory Perfumes a menudo comienzan con un solo aroma. En el caso de Samphire, fue una hoja joven de verbena arrancada del jardín de un amigo en una tarde de primavera. El aroma era tan deslumbrantemente fresco que decidieron encontrar una manera de capturar su subidón picante para su tercera fragancia. Aplastaron una ramita de verbena con una pizca de bayas de enebro del especiero, y Samphire comenzó a tomar forma. Pasando de la cocina al laboratorio, mezclaron aceite de cítricos, florituras de lavanda, albahaca y romero, y notas de fondo de ámbar blanco y musgo de roble para crear un aroma brillante, fresco y aromático con una ligereza al tacto que desmiente su complejidad y longevidad en la piel. El aroma final evocaba tan claramente la orilla del mar que solo podía llamarse Samphire. Fundada en 2011, los especialistas británicos en fragancias, Laboratory Perfumes, elaboran fragancias únicas, sin género, formuladas científicamente para reaccionar ante el usuario y evolucionar a lo largo del día. Inspirada en las flores naturales, hierbas y productos botánicos aromáticos de Gran Bretaña y más allá, la gama de esencias y velas está hecha de aceites naturales, seleccionados con cuidado y mezclados con precisión. Es un nuevo método para hacer perfume a la antigua.