Después de trabajar durante años como gerente de proyectos para un sello discográfico, Marjorie Coste decidió alejarse de la industria de la música y comenzar una nueva aventura creativa. Inspirada por su hermana, propietaria de dos boutiques en Lille, Marjorie decidió abrir su propia tienda de artículos para el hogar y regalos en París. Les Saintes Chéries fue el resultado; una cueva de tesoros de Aladino que los clientes de todas las edades apreciarán.
"Me encanta tener una boutique independiente, ya que me permite conocer realmente a mis clientes. Durante 9 años he visto a niños crecer hasta convertirse en adultos, familias expandirse y cambiar, y he ayudado a innumerables clientes a descubrir productos que realmente les encantaron".